Entre sudor, luces y gritos se reabrió el palenque de Villahermosa luego de dos años de inactividad por la pandemia de Covid-19. 

Carlos Rivera subió la temperatura de tabasqueñas y tabasqueños incluso más que la sensación térmica de 35 grados que se sentía al interior del popular recinto.
Al ritmo de "Lo digo", alrededor de dos mil personas arrancaron el coro de sus canciones favoritas del ex Simba en la obra de Disney "El Rey León".
El cantante inició su presentación entonando el himno de la máxima fiesta de los chocos "ven, ven, ven. Vamos a Tabasco que Tabasco es un Edén". 

La noche transcurrió entre canciones de sus primeros álbumes y los más recientes, las Riveristas no sólo corearon, sino que también lucharon contra condiciones incluso médicas para presenciar el primer concierto de su ídolo.

"Ni la cirugía de apéndice fue impedimento para estar en tu concierto, Carlos", se leía en uno de los tantos carteles que se entendían a lo largo de las gradas.
Las fans representaron su amor por el exacademico con gorras, playeras, sábanas e incluso con réplicas tamaño real, las cuales en algún punto fueron firmadas por el intérprete de "Que lo nuestro, se quede nuestro". 
Rivera tuvo cuatro cambios de vestuario, algunos como parte del show, otros debido a las altas temperaturas de Tabasco.
El momento brillante fue cuando al interpretar "En otras vidas", una pareja vivía uno de los 'Sí' más importantes de sus vidas; el que los convirtió en prometidos.
El artista en diversas ocasiones le pidió a su público que aprovechara al máximo el encuentro y dejara a los demás disfrutar de la misma manera, pues han sido dos años sin poder tener una actividad masiva. 
Dentro del palenque se corearon canciones como "Regrésame mi corazón", "Recuérdame", "Fascinación", "Te esperaba", "Sería más fácil", entre otras nuevas que aprovechó para presumir el lanzamiento de la versión delux de su más reciente producción: Leyendas.
Para el goce de los asistentes, el evento se llevó a cabo sin incidentes, sólo cientos de personas unidas disfrutando de la voz de su cantante favorito.
Carlos Rivera no dijo adiós, sino 'hasta pronto', pues dijo, siempre tiene ganas de volver a disfrutar del calor tabasqueño.