¡Leyendas urbanas jarochas! La Casa de Alcocer y Revillagigedo

El puerto de Veracruz es un lugar plagado de leyendas e historias sobrenaturales, al ser uno de los puertos más importantes de América Latina ha acumulado sin fin de historias, pero en las entrañas de la ciudad hay lugares cuya reputación entre la gente ha causado expectativa y ha creado a su alrededor pavorosas leyendas urbanas.

La casa marcada con el número 344 de la calle Alcocer esquina Revillagigedo, encierra en su interior una historia digna de una película de horror. Como si fuera una película de terror, entre la gente está la leyenda de que está casa que ha sido adquirida por varias personas o rentada, nunca dura mucho tiempo ocupada, pues la historia dice, que a la gente que vive dentro de ella, les resulta imposible vivir y todos cuentan la misma historia de que esta casa parece estar embrujada.

Los inquilinos quienes no duran más de una semana habitándola, manifiestan escuchar ruidos extraños, llantos de bebés, lamentos, objetos que se mueven solos, presencias invisibles que recorren el interior en la madrugada y sienten una sensación de estar siendo observados, lo cual les causa una gran angustia y un escalofrío que les hiela la sangre.

Lo que pocos saben es que ésta casa por muchos años fungió como una clínica clandestina de abortos, donde no sólo se practicaban en las primeras semanas de gestación, sino en muchas ocasiones prácticamente con bebés recién nacidos. Cuando por fin las autoridades realizaron el cateo en el lugar, se pudieron encontrar restos de fetos en frascos y bolsas de basura, indumentaria insalubre, y se dice, restos de bebés mal enterrados en el patio trasero.

Dicen los estudiados en el tema, que ésta casa quedó maldita debido a la trágica muerte de incontables de vidas inocentes ahí, o bien, que seres del bajo astral quedaron instalados ahí atraídos por el dolor y la tragedia que envuelven ese inmueble. Y otra nos cuenta que mucha gente llegó a colarse al inmueble para realizar rituales satánicos.

Ahora que ya sabes la historia, si pasas por aquel lugar, deberías de estar muy atento, pues no son pocos los que han reportado que en las noches más silenciosas desde el interior de la casa se puede escuchar algo que podría causar terror.

Por ésta esquina de Alcocer y Revillagigedo pasan miles de personas diariamente, pero la casa-clínica ha pasado inadvertida al no ser muy conocida ésta historia; pero desde hoy, ésta casa puede ser vista por todos quienes pasen por Alcocer caminando, en auto particular o camión urbano de las rutas Norte-Sur, Bolívar, Alcocer, Bajadas y Pochota; viniendo desde Alemán hacia Cuauhtémoc.